LAS REDES, UN NUEVO ESPACIO SOCIAL

Comienzo este artículo, con las ideas de Moreira “... las redes de ordenadores, y especialmente Internet, pueden jugar un papel importante en el proceso de innovación y transformación del actual modelo de enseñanza implementado en las instituciones universitarias.” Con referencia a esto, podría ampliarse este concepto diciendo que si bien en los ciclos superiores se han profundizado mucho más estos aprendizajes, Internet favorece los aprendizajes en todas las instituciones educativas.
El impacto progresivo de las nuevas herramientas tecnológicas en la educación, está configurando nuevos ambientes de enseñanza y aprendizaje que hacen difusa la frontera entre las situaciones educativas presenciales y no presenciales. Se plantea así la necesidad de incorporar el blended learning o “aprendizaje mezclado” es una alternativa que permite superar las limitaciones del aprendizaje en línea a partir del aprovechamiento de las virtudes de la enseñanza presencial y la no presencial posibilitando el desarrollo integral del estudiante.
Pero en la práctica cotidiana, las distintas propuestas de enseñanza que incluyen de algún modo TIC, se están incorporando de diversas formas: algunas veces como recurso de enseñanza; otras como situaciones que complementan la enseñanza presencial a través del uso de una página web institucional o de grupos y comunidades de aprendizaje para el intercambio y puesta a disposición de materiales y recursos, otras desarrollan una formación totalmente mediada a través de entornos en línea.
De estas diversas opciones, Internet en sus diversas funciones: comunicativas, de transmisión y facilitación de la información- , constituye un soporte didáctico que configura proyectos educativos presenciales y no presenciales. Por lo tanto, Internet (y las nuevas tecnologías en general), no sólo aporta recursos novedosos y potentes para los procesos de formación, sino que posibilita el diseño de nuevos escenarios con valor educativo (Echeverría, 2000).
Moreira, hace mención en el texto ¿qué aporta internet al cambio pedagógico en la educación superior? A lo expresado por (Estebanell y otros, 1998): los sistemas de comunicación facilitan que grupos de alumnos y/o profesores constituyan comunidades virtuales de colaboración en determinados temas o campos de estudio. De esta forma cualquier docente puede ponerse en contacto con colegas de otras universidades y planificar experiencias educativas de colaboración entre su alumnado.
En los últimos años, ha ido tomando fuerza el concepto de blended learning en la medida en que se combinan o articulan, situaciones de aprendizaje presenciales y en línea. Frente a esto, Garcia Aretio (2004), hace mención que es más apropiado, utilizar el término “Modelo de enseñanza y aprendizaje integrado” en lugar de “aprendizaje mezclado”, ya que de esta manera se permite incluir y no ignorar la tarea del docente que es quien diseña y desarrolla el proceso de enseñanza.
Uno de los cambios que conlleva poner las nuevas tecnologías al servicio de un proyecto educativo es la modificación de la relación pedagógica que implica un pasaje de un modelo transmisivo hacia un modelo que implica intercambios, interacciones, aprendizajes en colaboración, resultado de la experiencia compartida entre los participantes.
Sin embargo, muchas veces se produce un defasaje en el proceso de enseñanza y aprendizaje, al momento de evaluar. El docente considera los aprendizajes de los estudiantes atendiendo únicamente a aspectos más tradicionales ligados al desarrollo presencial del curso, dejando de lado todo el proceso de intercambio y todas aquellas producciones que se desarrollaron en condiciones de no presencialidad. Ante esto, Camilloni, hace referencia a la coherencia que debe existir en este proceso: “La actitud del docente frente a la evaluación deberá ser abierta, coincidiendo con su teoría de la enseñanza.” “La evaluación,..., debe ser consistente con las
concepciones de la enseñanza y del aprendizaje.”
Si se toma la decisión de incluir recursos digitales en una propuesta de enseñanza, se debe estar atento a que todo recurso que se utilice en el aula debe seleccionarse y evaluarse con el fin de conocer las ventajas y desventajas que presenta su uso pedagógico y al momento en que ese recurso puede ser utilizado, de acuerdo con las etapas o momentos de la programación.
La evaluación de los aprendizajes debe contener cuatro aspectos fundamentales: validez, confiabilidad, practicidad y utilidad. De manera de satisfacer las necesidades relacionadas con los procesos de enseñanza y de aprendizaje planificados. En todo proceso (agrega Camilloni) la evaluación debe permitir orientar futuros aprendizajes, por lo tanto debe existir coherencia entre la propuesta de enseñanza, los recursos que se implementan y el programa de evaluación que se proponga.
Si el alumno considera que solamente será evaluado por aquellos aportes que haga en la presencialidad, le restará importancia a las producciones y propuestas que se propongan a través de los recursos de la red.
El desafío actual para los docentes es encontrar estrategias para posibilitar que en los encuentros entre los estudiantes y las computadoras se consigan residuos cognitivos transferibles. Cuando una propuesta de enseñanza incluye algún tipo de innovación pedagógica basada en el uso de las nuevas tecnologías, ésta se complementa con cambios en las modalidades de enseñar, de modificación en la relación pedagógica entre docentes y alumnos, y alumnos entre sí y por su puesto también en la perspectiva evaluativa.
Son de destacar los portafolios electrónicos, como uno de los instrumentos para la evaluación de las producciones académicas de los estudiantes que complementan las instancias presenciales con escenarios mediados por tecnologías. La elaboración de un portafolios a lo largo de toda la etapa de formación le permitirá al estudiante, al momento de graduarse contar con portafolio digital como la evidencia más palpable de sus competencias profesionales.
BIBLIOGRAFIA:
Contenido de las sesiones propuestos en el módulo enseñar y aprender en redes.
Camilloni, a. y otras (1998), La evaluación de los aprendizajes en el debate didáctico contemporáneo, Paidós, Buenos Aires.
Revista Iberoamericana de Educación número 24 Monográfico: tic en la educación septiembre - diciembre 2000 Título: Educación y Tecnologías Telemáticas Autor: Javier Echeverría
.